Los colores de las casas dicen mucho de las personas que las habitan y de las ciudades que las cobijan… Aquí te dejamos 7 ciudades que esconden increíbles calles a todo color:
1. Bristol (Inglaterra)
Dicen que Bristol es la ciudad de los colores. Sus calles son un ejemplo de ello. Al otro lado del canal, enfrente del puerto deportivo Bristol Marina, se divisa un curioso conjunto de casas. Unas modernas y otras más antiguas, pero todas pintadas con atractivos y llamativos colores… No obstante, si buscas algo más clásico la calle Ambrose Rd en el distrito de Clifton responderá a tus expectativas. Toda una amalgama de colores en las fachadas de las viviendas que dan a la calle un aspecto realmente singular.
2. Kiev (Ucrania)
Con sol o sin él, con lluvia y sin ella, siempre se puede ver el arcoíris en la ciudad de Kiev. Sólo hay que contemplar la variedad cromática de las edificaciones del lujoso barrio de Vozdvyzhenka. Una zona renovada totalmente a principios del siglo XXI, pero imitando el estilo arquitectónico propio de finales del XIX. Las construcciones son únicas y mezclan la belleza de sus trazos con un colorido vivo y espectacular. El barrio está parcialmente habitado. Un paseo por sus tranquilas calles te trasladará a un mundo de sensaciones visuales difíciles de olvidar.
3. Trondheim (Noruega)
Trondheim es la tercera ciudad con más habitantes de Noruega, detrás de Oslo y Bergen. La urbe es toda una oda a la pulcritud y el orden. Los colores de las casas de madera que recorren el río Nid (Nidelva) a su paso por la ciudad nos enseñan una imagen con una belleza extrema difícil de imaginar. La estampa desde el bonito puente Old Town Bridge sólo está al alcance de gente viajera con algo de curiosidad.
4. Burano (Italia)
La isla de las casas de colores es conocida como Burano. Un minúsculo enclave insular que está situado a unos siete kilómetros de la emblemática ciudad de Venecia. Un fantástico paseo por sus callejuelas, plazas y canales de agua salada suponen todo un deleite de color para la vista de turistas y lugareños.
5. Copenhague (Dinamarca)
Copenhague es una ciudad moderna y de una belleza infinita. Su puerto nuevo, Nyhavn, es una zona con la restauración y el color en plena ebullición. Las fachadas de sus edificaciones con una fantástica variedad cromática dan al entorno una riqueza visual sin parangón. Este maravilloso paseo marítimo y canal con marcados aires del siglo XVII es, sin duda, uno de los mil lugares con encanto de la capital danesa.
6. Timișoara (Rumanía)
El mítico actor protagonista de los inolvidables filmes de Tarzán nació aquí. Timișoara es una urbe de película con un casco histórico impresionante. Hace años su aspecto era algo desolador con construcciones mucho más que envejecidas. Sin embargo, poco a poco, la renovación ha ido llegando y emblemas de la ciudad, como la Piața Unirii, se han ido transformando con edificios finamente restaurados. Sus fachadas pintadas con una amplia gama de colores confieren a la plaza un ambiente sumamente encantador. La mezcla de estilos arquitectónicos distintos, secesionista y barroco, le dan a ese espacio una belleza singular…
7. Schärding (Austria)
Las calles de la pequeña localidad austriaca de Schärding parecen una auténtica paleta de colores. Las fachadas de sus construcciones barrocas presentan una encantadora combinación cromática reflejo de un gusto exquisito. La vista del transeúnte se recrea al observar el bello colorido de sus calles. Schärding está situada cerca de la frontera con Alemania y guarda con muchísimo esmero su particular tesoro barroco.